El título de este artículo induciría a pensar que los sujetos a los que se refiere este encabezado podrían ser personas sin criterio, sin afán de saber, personas muy alejadas de la Ciencia.
Pero va a ser que no. Los sujetos que afirman el contenido de esa frase son, ni más ni menos, los próceres del saber en diferentes ramos.
No hace muchas semanas que salió a relucir la noticia de que las inoculaciones frente al bicho de la covid contenían "plásmidos", unos paquetitos de información de ADN que no debieran estar allí. Además, se identificaron como pertenecientes al virus de mono SV40, tristemente famoso por generar abundantes problemas en la población por su aparición en otras vacunas, como la de la polio.
Como es de dominio público, la FDA reconoció en tiempos atrás en su guía para la industria que la presencia residual de este tipo de productos ADN podía representar un riesgo por su potencial oncogénico y/o infectivo. Hablando en cristiano, que podían producir cánceres y/o infecciones.
Donde dije "digo" digo "Diego". Ahora, en este caso de las inoculaciones covid, parece que a la FDA le ha dado un ataque de amnesia parcial y ha determinado que cualquier contaminación residual en estos productos anticovid no es un problema, y sigue respaldando la calidad, seguridad y eficacia de los productos ARNm.
Como ha habido científicos que han alertado a la FDA de la aparición de estas estructuras de ADN en los viales a inocular a las personas, la FDA ha tenido la desvergí¼enza de comunicar que cierra las investigaciones sobre esta contaminación de ADN de las "vacunas" covid y que no va a proporcionar más comentarios sobre este tema.
Lo más extraño que veo es que después de estas declaraciones de la FDA, la agencia gubernamental cuyo propósito es garantizar a la población norteamericana la salubridad de alimentos y productos sanitarios, sobre un tema tan importante"¦ no haya rodado
ninguna cabeza. Todos continúan en sus puestos. Todo sigue igual.
¿Qué conclusión se puede sacar respecto a la estructura y función de esta agencia y del gobierno que la sustenta? ¿Dónde está la Ciencia y sus científicos? Salvo una minoría, los científicos que han descubierto este hecho y han levantado la liebre, todos callados.
Para no ser pesado con el mismo monotema "covid", voy a mostrar otro ejemplo que le da sentido al título de este artículo.
Hace pocos días he leído una noticia que colocaba en la cuerda floja a otra agencia norteamericana. En este caso el Programa Nacional de Toxicología, perteneciente al Servicio Nacional de Salud.
El NTP fue fundado en 1978 y su finalidad es, como lo indican en su página web, "esforzarse por permanecer a la vanguardia de la investigación científica y el desarrollo y aplicación de nuevas tecnologías para la toxicología y la biología molecular modernas".
En su estudio de 2018 sobre las radiaciones de radiofrecuencia por los sistemas 2G y 3G, el NTP encontró "evidencia clara" de carcinogenicidad en ratas macho por exposición a la radiación de teléfonos celulares en lo que posiblemente sea el estudio toxicológico más sólido jamás realizado sobre esta toxina ambiental.
Más concretamente, se detectaron schwannomas, unos tumores malignos en el corazón de esas ratas macho; y, con algo menos de evidencia, gliomas cerebrales malignos y otros tipos de cánceres en las glándulas suprarrenales, como feocromocitomas (tanto benignos como malignos).
La versión de noviembre de 2018 de la hoja informativa del NTP prometía estudios futuros, tanto de pequeño recorrido (semanas o meses) como estudios a largo plazo colocando como foco de atención el daño del ADN de tejidos expuestos.
Como se puede leer, tenían en cuenta los actuales cambios de tecnología en la industria de las telecomunicaciones para seguir estudiando diferentes frecuencias de emisión y así poder identificar marcadores de daño biológico por la exposición a esas frecuencias.
¿Quién podría sospechar que en su última hoja informativa, de enero de 2024, el NTP comunicara que daba por cancelada cualquier nueva investigación sobre el tema?
¿Motivos que aduce para semejante bajada de pantalones? Alegan que debido a desafíos técnicos y falta de recursos. Punto final
El NTP, hasta ahora, era la única agencia federal en los EE.UU. que estudiaba los efectos de la radiación de radiofrecuencias desde la década de 1990, después de que el Congreso cortara la financiación de la EPA para esta investigación.
Con lo cual, ante las enormes dudas generadas sobre la seguridad de este tipo de radiaciones en la salud humana, ya no sólo de los sistemas 2G y 3G estudiados en 2018 sino con los actuales 4G y los 5G que ahora se están implementando, no hay ningún
organismo norteamericano que quiera estudiar ese enorme peligro potencial para la salud humana.
A la población sólo nos queda exigir la puesta en marcha del principio de precaución. Negarnos a pasar por el aro de la invasión e implementación de la tecnología 5G sin ninguna prueba de salubridad.
El silencio de la administración, la falta de información transparente, el desconocimiento, la dejadez, la desgana de la gente pueden posibilitar que pronto nos hallemos sumidos en un ambiente cargado de nuevas radiofrecuencias con muchos visos de generar problemas de salud importantes.
Habla con las personas de tu alrededor sobre el tema: familiares, amigos, compañeros de faena"¦ Únete a personas que estén concienciadas sobre el tema para informarte, para pedir transparencia en los ayuntamientos que van a permitir el desarrollo de esta nueva red 5G colocando incontables antenas por toda la geografía.
Hay suficiente base de estudios científicos como para oponerse a esta nueva intoxicación ambiental. Si las diversas administraciones prefieren no estudiar y mirar hacia otro lado nos toca otra vez dar testimonio de esta realidad tan irracional como generalizada.
Silvano Baztán Guindo
Salud para ti y los tuyos.
https://diario16plus.com/prefieren-no-estudiar/