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A pesar de las 800 denuncias siguen las obras en la Calle Armonio de Valladolid. Habrá movilizaciones.
Sin licencia, sin petición de licencia, pero con la desvergüenza suficiente
Martes 2 de mayo de 2006 · 1405 lecturas
AVAATE (ASOCIACIÓN VALLISOLETANA DE AFECTADOS POR ANTENAS DE TELECOMUNICACIONES) informa:
El pasado viernes día 21 de Abril de 2006, a las 11 horas se presentaron en el registro municipal del Ayuntamiento de Valladolid más de 700 denuncias contra la instalación de una Estación Base de Telefonía en la calle Armonio nº 36, 38 y 40 (Junto al Hospital nuevo), propiedad de la empresa COVIPRO SL, puesto que dicha pretendida instalación no dispone de ninguna licencia, ni la ha solicitado (según el propio Ayuntamiento de Valladolid). En su momento, los vecinos de la zona ya lo denunciaron a la Policía Local, la cual se presentó en varias ocasiones y obligó a los instaladores a abandonar su tarea.
A pesar de ello, las empresas instaladoras no han tenido ningún reparo en continuar con sus trabajos el martes y miércoles de esta semana, y seguir intentando montar su Antena, lo cual ha llevado, de nuevo, a los vecinos a ponerlo en conocimiento de la Policía Local.
Sin embargo, para sorpresa de todos, y como ha podido comprobar esta Asociación, la Policía Local, en un primer momento advirtió a los vecinos que ya no iban a personarse allí para comprobar que continúan los trabajos sin licencia alguna. Fue tras varias llamadas y haciendo entender a la Policía Local que su deber es actuar en estas situaciones, igual que en todas las que se observan obras ilegales, que mandaron de nuevo una patrulla para hacer las comprobaciones.
Esta actitud de la Policía Local ha permitido días enteros de trabajo a los instaladores, y los vecinos no van a permitir bajo ningún concepto que esto siga así, advirtiendo que, de no proceder de inmediato a poner fin a esta actitud chulesca y despreciativa de la operadora en cuestión, se verán obligados (y así lo harán) a convocar concentraciones y manifestaciones contra la actitud de la empresa instaladora, la empresa propietaria del edificio, y el Ayuntamiento de Valladolid
