El Norte de Castilla 19 de septiembre de 2003
Ciencia y conciencia
ALFONSO BALMORI MARTÍNEZ/VALLADOLID
Apenas tres días después de la publicación en el diario británico ’The
Independent’ de un artículo titulado ’Los móviles envejecen’ basado en
los hallazgos del profesor Salford, investigador de la Universidad de
Lund (Suecia), y publicado en la prestigiosa revista ’Environmental
Health Perspectives’ del Instituto de Ciencias Ambientales y de la Salud
americano.
Apenas un día después de la difusión del estudio de los equipos de
investigación de los profesores Navarro y Gómez-Perretta de la
Universidad valenciana, publicado en la revista americana
’Electromagnetic Biology and Medicine’ una de las más prestigiosas del
mundo en bioelectromagnetismo y salud, que demuestra que la aparición
del síndrome de microondas aumenta de forma estadísticamente
significativa al disminuir la distancia a las antenas de telefonía y que
su severidad está directamente relacionada con la densidad de potencia
medida en cada domicilio de los vecinos de La Ñora (Murcia) (singulares
conejillos de Indias).
Más de 30 ańos después de que las primeras investigaciones mostraran los
efectos de las microondas sobre los seres vivos, el Ministerio de
Sanidad asegura en una nota de prensa, publicada en El Norte de Castilla
(16 de septiembre), que los teléfonos móviles y las antenas no ocasionan
ningún riesgo sobre la salud y que no es necesario cambiar sus límites
de emisión. El Ministerio de Sanidad debe creer que a fuerza de repetir
muchas veces una mentira, ésta se transformará en verdad.