20 de mayo 2015
Las directrices internacionales de protección para los CEM (campos electromagnéticos) no ionizantes son inadecuadas.
Numerosas publicaciones científicas recientes han demostrado que los CEM afectan a los organismos vivos a niveles muy por debajo de la mayoría de las directrices internacionales y nacionales.
Los efectos incluyen el aumento de riesgo de cáncer, el estrés celular, el aumento de radicales libres dañinos, daños genéticos, cambios estructurales y funcionales del sistema reproductor, deficits en el aprendizaje y la memoria, trastornos neurológicos y efectos negativos en el bienestar general de los seres humanos. El daño va más allá de la especie humana, ya que cada vez hay más evidencia de efectos nocivos tanto para las plantas como para los animales.
Estos resultados justifican su llamamiento a las Naciones Unidas (ONU) y a todos los Estados miembros del mundo, para estimular a la Organización Mundial de la Salud (OMS) a ejercer un importante liderazgo en el fomento de la elaboración de directrices para los CEM que protejan a la población, a fomentar medidas de precaución, y a educar al público en general sobre los riesgos para la salud, especialmente para los niños y en el periodo de desarrollo fetal. En caso de no tomar medidas, la OMS está incumpliendo su cometido como organismo internacional preeminente de salud pública.
Página web del llamamiento: www.emfscientist.org.
Asociación Vallisoletana de Afectad@s por las Antenas de Telecomunicaciones - AVAATE